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El escenario estaba listo, las luces parpadeaban y la multitud vibraba de emoción. El día uno de la Fiesta Nacional de la Confluencia se presentaba como una promesa de música, energía y diversión. Y ciertamente, no decepcionó.
Desde tempranas horas de la tarde, luego de horas de lluvia, los entusiastas de la música comenzaron a llegar a la Isla 132, ansiosos por sumergirse en una experiencia única. Con imponente escenario con pantallas led que iluminaban al publico, el ambiente estaba impregnado de anticipación y alegría.
El festival neuquino cuenta con talentosos artistas locales (por la PreConfluencia) y nacionales.
Desde el ritmo de BM hasta Callejero Fino, cada actuación cautivó a la multitud durante las primeras horas de la noche.
Pero fue Cruzando el Charco, encendió la pasión del público con su fusión única de rock y folk. Con letras y melodías que resonaban en el alma, la banda argentina dejó una impresión indeleble en todos los presentes.
Y luego llegó el momento culminante de la noche: el magnífico cierre a cargo de Tan Bionica, junto a la icónica presencia de Chano. Desde la primera cancion, la energía en el aire se intensificó hasta alcanzar su punto máximo en la magica ciudad de Neuquen. Dando un show, que duro 120 minutos, al igual que su River Plate en CABA.
Fue una una celebración de la música y la cultura. Neuquen se convirtio en la ciudad mágica.
Tuvimos el priviligio de ser parte de ella, en un espacio exclusivo junto a marcas y diseñadores que participaron con premios especiales a los asistentes en el Campo Preferencial de la Fiesta Nacional de la Confluencia.
¡Si estas en campo preferencial, visitanos!
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